Relato de dos ciudades: De La Habana a Hamburgo
Nacido en la mayor isla caribeña en 1962, el brillante director orquestal/ pianista/compositor/arreglista Ricardo Álvarez estudio en la prestigiosa Escuela Nacional de Arte (E.N.A.) de la Habana y trabajó con varios grupos de rock, funk, jazz, y pop en su tierra natal, antes de emigrar a Alemania en los años 90. Más temprano que tarde, el habanero expatriado se convirtió en uno de los principales catalizadores de la música antillana en Europa, particularmente despues de fundar la “big band” apropiadamente denominada Cubanísimo e integrada por once instrumentistas y un par de cantantes, todos los cuales resultan ser cubanos exiliados que encontraron refugio permanente en la reunificada nación natal de Beethoven. Su dedicación apasionada a la interpretación contemporánea de multiples géneros y estilos cubanos se revela genuinamente a través del repertorio de su segunda grabación, tal como se documenta en los párrafos siguientes.
Hamburgo tiene montuno: El repertorio cubanocéntrico de “Cubanísimo”
La letra de “Marketing”; la composición inicial de Álvarez, puede ser aplicada no solo a los despiadados procedimientos empleados en la venta de productos comerciales, sino tambien a varios métodos de adoctrinamiento político implementados a través de este mundo en que vivimos. Engalanada con un arreglo eficaz de Giraldo Piloto (hijo) ― líder de la poderosa banda cubana llamada Klímax― esta timba dura se encarece con la intervención magnífica del poderoso guitarrista eléctrico Dany “Labana” Martínez, renombrado por sus aclamadas colaboraciones con Julio Barreto, Tony Martínez y Raúl Pineda.
Compuesta y orquestada por Álvarez, la timba “Muela Profesional” se inspira en la utilización perjudicial entre los músicos cubanos de la falaz práctica colloquial conocida como “muela”, un sustantivo definido por Carlos Paz Pérez en su Diccionario de habla popular y vulgar como “charla, conversación con fines persuasivos”. Esta timba original hace resaltar la sabrosa ejecución baterística de Giraldo Piloto (hijo), incuestionablemente dotado con los convenientes genes musicales, como vástago pródigo del prolífico compositor de filin tambien llamado Giraldo Piloto y sobrino del legendario baterista/timbalero Guillermo Barreto, alias “El Loro”.
El arreglo de la composición de Piloto titulada “Partido de Fútbol” fue realizado por Yusef Díaz, miembro fundador y tecladista de Klímax. La relación entre compositor y arreglista resulta ser particularmente efectiva en esta guaracha-son, considerando la función desempeñada por Díaz desde hace mucho tiempo como lugarteniente orquestal de Piloto. No importa que el fútbol —uno de los muy pocos deportes de equipo en los cuales no sobresalen los atletas cubanos— no ha adquirido mucha popularidad en su natal isla caribeña.
Al contrario de lo que sucede en la mayoría de las canciones cubanas contemporáneas, la letra de “La Carne” despliega los humorísticos patrones de doble sentido tradicionalmente asociados con los compositores jodedores del cancionero cubano, tales como Ñico Saquito y Pedro Luis Ferrer. Esta original timba dura incluye un animado solo aportado por el trompetista número uno radic
ado actualmente en La Habana —el singular y único Julio Padrón.
Una de mis piezas favoritas, la composición de Piloto titulada “Canto a la Música Cubana”, cuenta con un arreglo maravilloso del talentoso pianista Eddy Cardoza. Elaborado con el propósito de rendir tributo adecuado a las contribuciones históricas de numerosos íconos de la música cubana, este hermoso son-chá se enriquece con la asombrosa versatilidad estilística de uno de los mejores cantantes cubanos de nuestros tiempos —Sixto Llorente, alias “El Indio”. Aunque los habitantes originales de Cuba fueron virtualmente exterminados por los españoles, el adjetivo “indio” se utiliza actualmente en dicha isla para referirse a mulatos con pelo lacio.
Compuesta por el cantante Justo Suárez y orquestada por Álvarez, la divertida timba “El Nombrete” extrae su inspiración de la diseminada utilización de pseudónimos y apodos entre los cubanos. Tales arbitrarios pero descriptivos nombretes se fundamentan en multiples factores, incluyendo características físicas, patrones de conducta, preferencias culinarias o antecedentes étnicos. Debido a alguna razón desconocida, se asignaron apodos particularmente crueles a los trombonistas nativos, tal como se ejemplifica en los casos de Antonio Leal (alias “Culito de mono”) o Lázaro González (alias “Cara de moco”).
La letra del número de Álvarez titulado “No Queda Más” intenta ofrecer un mensaje confortante y estimulante a aquellos que se han alejado de sus tierras natales en busca de horizontes más amplios. Impulsado por el arreglo accesible del trompetista Oslén Ceballo (antiguo integrante de Sierra Maestra y Afro-Cuban All-Stars), este son salsificado debe ser considerado como la selección del disco que posee mayor potencial de exito comercial.
En su función como arreglista, Álvarez es capaz de adaptar el formato timbero a los fundamentos rítmicos de la guaracha, el guaguancó, e inclusive el songo, tal como se demuestra en la composición de Osmany Collado titulada “Loco Loco”. Aunque otros músicos cubanos alegan que la timba es meramente un subproducto del songo, Álvarez identifica a continuación sus diferencias básicas: “El patrón del songo es marcado mayormente por las tumbadoras y la batería y es un poco más lento y más cercano a la charanga, mientras que la timba es algo más rápida, más agresiva y más cercana a la rumba”.
La composición de Álvarez (con arreglo de Díaz) titulada “Amor Virtual” es probablemente la primera guaracha-son (o la primera canción cubana, punto y aparte) inspirada por las ambivalentes opciones románticas que han sido descubiertas a través del Internet. Al ser interrogado sobre su evidente afición compositiva al formato de la guaracha-son, Álvarez ofreció el siguiente comentario: “Me gusta su dimension bailable, así como su aspecto travieso”.
Álvarez aplica un arreglo metálico, al estilo de Irakere, a “Herencia Yoruba”, un guaguancó-guaracha de PIloto que ofrece homenaje a las significativas influencias religiosas de origen lucumí o congo en la cultura popular cubana. Este tema presenta las contribuciones sobresalientes del tumbador Elio Rodríguez, así como un admirable solo de saxo tenor proporcionado por Orlando “Cubajazz” Sánchez (conocido por sus labores con David Murray, Mezcla y Pablo Milanés).
La letra de la composición final de Álvarez, “Una Vela en la Ventana” hace referencia al síndrome postraumático derivado de una relación fracasada. Escuchen la distinguida interposición baterística desplegada en esta guaracha-son por Alfredo “Pocho” Rosales. Ruego que me disculpen por ser tan sarcástico y “politicamente incorrecto”: Aunque el derrogativo término “pocho” es empleado coloquialmente por la población de habla hispana al norte del Rio Bravo para identificar a ciudadanos estadounidenses de ancestros mexicanos, esto no suena como un solo tipicamente ejecutado por un baterista mexicoamericano. Ha sido comprobado, sin ninguna incertidumbre, que uno debe haber nacido en la isla previamente conocida como “La Perla de las Antillas” para poder generar tal alto nivel de “yunfa”, término abstracto empleado entre los músicos cubanos como sinónimo de swing.
Luis Tamargo
Nevada, Nochebuena del 2011
(Conocido por su función como editor de Latin Beat Magazine Online, Luis Tamargo es un irreverente escritor anarquista cuyos comentarios sardónicos han aparecido en las grabaciones de Irakere, Paquito D’Rivera, Chucho Valdés, Gonzalo Rubalcaba, AmaditoValdés, Arturo Sandoval, Juan Pablo Torres, Mongo Santamaría, Patato, Mario Bauzá, Maraca, Alfredo Rodríguez, Anacaona, Cubanismo!, Carlos Averhoff, Orestes Vilató, El Negro Hernández, Cal Tjader, Giovanni Hidalgo, Jane Bunnett, Tolú, Bongó Logic, y muchos otros).
01 Marketing
02 Muela profesional
03 Partido de futbol
04 La carne
05 Canto a la musica cubana
06 El nombrete
07 No queda mas
08 Loco loco
09 Amor virtual
10 Herencia yoruba
11 Una vela en la ventana
Esta es la lista de exitos del nuevo cd, aca les dejamos un tema para que vean que bueno se pone esto.
